El jueves fue mi primer día de training (entrenamiento en el
puesto de trabajo) y lo cierto es que las cosas no salieron demasiado bien. Los
dos primeros días nos habían dado información general a un grupo grande de
personas, entre las cuales había varios españoles, así que hasta entonces había
disimulado con gracia que no entiendo nada de francés y me enteraba de
las cosas porque mis compañeros me lo traducían. En cambio, para el training
del jueves ya nos separaron por grupos más pequeños y nos daban información más
específica, por lo que faltó tiempo para que el muchacho que nos estaba
enseñando a mí y a un grupo formado por dos francesas y dos italianos - que
hablaban francés cual nativos-, se diese cuenta de que yo andaba perdidísima.
Debo reconocer que todos se portaron genial conmigo; me iban
preguntando todo el rato y me traducían en inglés las cosas que no me enteraba,
pero la situación no dejaba de ser incómoda. Con razón, el trainer fue a informar
a los mánagers de lo que pasaba y éstos me llamaron al despacho para hablar
conmigo. El mánager fue súper simpático y atento conmigo en todo momento, quiso
conocerme y que yo le contase mi punto de vista.
Le conté, obviamente, lo que yo sabía hasta el momento (que
es lo mismo que ahora, por cierto): en enero me hicieron una entrevista en
inglés en la que me dijeron que no pasaba nada por no hablar francés ya que es
el perfil que buscaban, para que llegásemos aquí y aprendiésemos con clases
aparte del trabajo en sí. Ahora me encuentro en un puesto de trabajo a los tres
días de aterrizar, sin clases de francés hasta el mes que viene y sin saber qué
está pasando a mi alrededor.
El mánager me escucha, me entiende y me dice que aun así
tienen que informar a Casting de lo que está pasando, y que yo tengo que
pensarme también lo que quiero hacer porque va a ser muy difícil para mí. Me
pide que vuelva al día siguiente para ver qué solución se pone al asunto, a lo
que yo digo “pero mañana es mi día off” y él me dice “ven mañana” y yo me
presento allí al día siguiente porque la vida es así y ya está.
Al salir de la oficina busco un baño para irme a llorar,
pero resulta que no hay baño en ese edificio y no puedo salir porque supondría
llorar delante de los Guests lo cual empeoraría todo bastante así que me siento
en una sala llena de compañeros a los que no conozco y cierro los ojos muy
fuerte para no llorar, pero no funciona porque estoy muy nerviosa así que
voilá! El primer día, llorando. Cualquiera que me conozca sabe lo poco que me gusta
a mí llorar en público, y encima rodeada de gente que no me entiende ni yo a
ellos. Pero bueno, saltemos esta parte y ya está.
GLOBOS BONITOS QUE NO LLORAN
Pasé una tarde y una noche malísimas, pensando ya en volar a
España de regreso porque si me ofrecen un puesto de principiante en cocinas o
parking, renuncio. El drama en mi cabeza era muy intenso. Afortunadamente la
mánager del viernes también fue súper agradable conmigo y me expuso más o menos
la misma situación, me preguntó que qué quiero hacer y le dije que lo tengo muy
claro: quiero terminar mis tres días de training. Prometo estar al 100% con
ello y que si luego no me siento cómoda o ellos creen que no puedo, pues ya
veríamos otras soluciones. Ella está de acuerdo conmigo, me dice que no me
preocupe, que ella empezó igual, sin una palabra de francés y que con el tiempo
todo sale.
Salí de la reunión mucho más tranquila y pude disfrutar del
resto de la tarde en el parque. Monté en un par de atracciones y vi la
cabalgata en primera fila. Además era el cumpleaños de mi madre y ya pude
llamarla y hablar con ella tranquilamente, porque mi madre sabe cuándo me pasa
algo nada más oírme y no quería preocuparle (FELICIDADES MAMI, TE QUIERO).
Hoy ha sido el segundo día de training y las cosas han ido
mucho mejor, he estado con un trainer sólo para mí por lo que he podido
asimilar mucha más información y cuando algo se me hacía demasiado difícil, me
lo contaba en español. Después de comer hemos hecho dos horas de teoría en la
que yo le contaba lo que había aprendido en francés, para ir preparándome para
mañana, que es el último día. Según sé, cuando llegue haré entrenamiento normal
y las dos últimas horas serán con un Cast Member que me evalúa lo que he
aprendido (en francés como es obvio) y decide si estoy preparada o no para
trabajar en el puesto. En caso de que no, no sé si me permitirán tener más días
de entrenamiento o me mandarán a fregar platos, tampoco quiero pensarlo
demasiado.
Así que bueno, esta es la situación. Deseadme suerte para
mañana, yo me voy a seguir estudiando para que nadie pueda decir que no lo
intenté. Hoy, desde luego es un gran día porque es el único que podemos decir
MAY THE FORCE BE WITH YOU
Estela.
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